Yo cuando me pongo, me pongo muy en serio. Y con una pizca de locura también. Como cuando preparé una magdalenada descomunal para repartir entre los compañeros de clase de uno de mis hijos.

Todo empezó cuando un día, de recién casada, me puse a preparar un bizcocho casero. Sí, ese bizcocho que toda señora que se precie ha de haber intentado hornear al menos una vez en su vida y que, comúnmente, esa primera vez queda por todos lados crudo y feo. No se desanimen las primerizas, se trata tan solo de una prueba de iniciación que hay que superar arremangándose y enfrentándose a los elementos una segunda vez, y una tercera, y así, hasta que al final sale del horno un bizcocho digno de cualquier pastelería de postín.

Pues bien, de ese bizcocho, resbuscando recetas sencillas y tradicionales por el inmenso océano de internet, di con una receta de magdalenas con copete que me encantó y no tardé en poner en práctica. La primera vez no salieron tan coquetas como las de la foto, pero la siguiente vez sí. Más tarde espolvoreé de azúcar y observé como en el horno se volvía costra y , una vez fría, crujía en la boca y le daba un nosequé de nivel al asunto. Fui cambiando los moldes de papel, pero la receta ya se quedó conmigo para siempre.

Y tan creído me lo tenía que decidí remangarme en serio, y enchufar el horno como si no hubiera un mañana. La fecha escogida, el cumpleaños de Nico. Dos magdalenas para cada niño embolsadas y atadas con cordel del que colgaba una etiqueta en papel kraft con los ingredientes de cada magdalena. El objeto de esto era que los padres supieran lo que llevaba por temas de alergia y el resultado fue una presentación perfecta por su simplicidad y aspecto artesano. Os enseño fotos de aquella hornada:



Y aquí va la receta para que lo intentéis en vuestra cocina. Ya veréis qué ricas y qué éxito.

Ingredientes:

  • 2 huevos
  • 150 gr. de azúcar
  • 60 ml. de leche
  • 170 ml. de aceite de oliva
  • 170 gr. de harina con levadura (harina para bizcochos)

Modo de hacerlo:

  • Medir cada ingrediente con la balanza.
  • Batir primero los huevos con el azúcar. Después añadir la leche y el aceite y batir. Después, la harina y batir.
  • Mientras bates, precalienta el horno arriba y abajo a 210º (aproximadamente, habrás de conocer tu horno)
  • Una vez que hayas batido, mete la mezcla en el frigorífico mínimo 15 minutos. Este detalle junto con el precalentamiento son los dos factores que crearan en tus magdalenas ese ansiado copete.

¡¡¡ Os deseo un dulce intento y reintento y reintento….!!!

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